Saxofón Latinoamericano


La investigación sobre el saxofón en el contexto de la creación musical contemporánea de América Latina ha sido una preocupación permanente del trabajo artístico y docente del Dr. Miguel Villafruela, con el propósito permanente de ampliar el repertorio para el instrumento e incentivar la motivación hacia la creación de obras para el saxofón de parte de los compositores latinoamericanos.

En ese sentido, esta publicación Saxofón Latinoamericano tiene entre otros objetivos, a difundir la creación de los compositores latinoamericanos para saxofón e informar todo lo relacionado con el repertorio para el instrumento, existente en esta región del mundo.

Esta página es la primera edición para Internet que aborda el tema del saxofón en América Latina y a la vez se convierte en la actualización y renovación constante de su libro El Saxofón en la Música Docta de América Latina.

Obra escogida

CompositorOrrego-Salas, Juan (1919 -2019 )
PaisChile
ObraPartita, Op 100 (1988)
FormatoConjunto mixto
Instrumentación

Saxofón alto, violín, violoncello y piano.

Movimientosa) Allegro deciso e cantabile b) Allegretto c) Adagio pensieroso d) Allegro deciso
Duración19:00
Nivel8° año
Dedicado a:Eugene Rousseau
Datos Compositor

Juan Orrego-Salas nació en Santiago en 1919. Desde niño se acercó a la música y comenzó sus estudios de piano en 1925 con Julia Pastene y luego con Alberto Spikin. En 1936 ingresó al Conservatorio Nacional de Música de la Universidad de Chile y estudió composición con Pedro Humberto Allende y análisis e historia de la música con Domingo Santa Cruz.

Simultáneamente cursó arquitectura en la Pontificia Universidad Católica de Chile y se graduó en 1943. Al año siguiente concluyó sus estudios de música y, becado por las Fundaciones Rockefeller y Guggenheim viajó a Estados Unidos, donde recibió lecciones de William Mitchell (teoría general de la música), Georg Herzog y Paul Henry Lang (musicología), Randall Thompson y Aaron Copland (composición) y Robert Shaw (dirección coral).

De regreso en Chile, en 1946, se sumó con entusiasmo al proyecto de desarrollo de la vida musical chilena que impulsaba, desde la Facultad de Ciencias y Artes Musicales de la Universidad de Chile, su decano, Domingo Santa Cruz, reintegrándose al Conservatorio Nacional como profesor de historia de la música (1942-1953) y de composición (1953-1961), fue secretario general del Instituto de Investigaciones Musicales de la Universidad de Chile (1947-1949), director de la Revista Musical Chilena (1949-1953) y director del IEM (1957-1959); además, ejerció la crítica musical en El Mercurio de Santiago y otros periódicos, fundó el Departamento de Música de la Pontificia Universidad Católica de Chile, organizó conciertos desde la ANC, de la cual fue Secretario, dictó conferencias, etc.

En 1961 fue nombrado profesor de composición y musicología latinoamericana en la Universidad de Indiana, Estados Unidos, donde fundó y dirigió el Centro de Música Latinoamericano. Desde ese momento se aceleró la brillante carrera internacional de Orrego-Salas.

Su música se difundió extensamente, se le invitó continuamente a congresos, simposios y festivales en diversas partes del mundo, se le llamó a participar como jurado en numerosos concursos, e importantes instituciones, conjuntos musicales y solistas le han comisionado obras (American Wind Symphony Orchestra de Pittsburgh, Fundación Koussewitzky, Baroque Chamber Players, Universidad de Cornell, Eugene Rousseau, Eastman School of Music, Orquesta Sinfónica Nacional de Washington, Consejo Interamericano de Música y decenas de otros).

Por otra parte, sus aportes a la musicología se expresan en numerosísimos artículos y libros publicados por diferentes editoriales. La trascendencia de su carrera musical ha sido reconocida ampliamente en Chile y en el extranjero, habiendo logrado importantes premios, entre los cuales se encuentran el Premio Gabriela Mistral, otorgado por el Consejo Interamericano para la Educación, Ciencia y Cultura de Washington, en 1988, y el Premio Nacional de Arte, otorgado por el Estado de Chile, en 1992.

Juan Orrego-Salas tiene un extenso catálogo en el que figuran obras de todos los géneros, muchas de ellas premiadas.

Biografía por Fernando García.

Comentarios

Partita Op 100, para saxofón alto, violín, violoncello y piano (1988), de Juan Orrego-Salas (n.1919).

Una de las carateristícas de la música de Juan Orrego-Salas es la claridad sintáctica con la que se desenvuelve su discurso sonoro, y la Partita op.100, para saxofón alto, violín, violoncello y piano es un buen ejemplo de ese diáfano tratamiento de las estructuras musicales.

La Partita fue escrita en 1988 por encargo de la National Endowment for the Arts (Washington, D.C.) y está dedicada al afamado saxofonista Eugene Rousseau y al Trío Haydn de Viena. Su título deriva del término spartite, vocablo italiano que alude a una pequeña serie de variaciones.

En su obra Orrego-Salas propone un motivo celular que genera todo el material creativo de ella. Emplea la escala octatónica, esto es, una escala que alterna tonos y semitonos, que Stravinsky -autor respetado y admirado por el compositor chileno- usó con frecuencia.

En la Partita dicha escala (Sol, La, Sib, Do, Do#, Re#, Mi, Fa#) está siempre presente de manera más o menos obvia.

Desde el primer movimiento, Allegro deciso e cantabile, Orrego-Salas evidencia su dominio de los componentes de la combinación instrumental elegida, y su vital decursar, en que aprovecha la escala octatónica asiduamente, lleva al auditor casi imperceptiblemente hacia el final del movimiento. El Allegretto que continua posee un esquema bipartito seguido de una coda. En este segundo tiempo el saxofón se explaya, resaltando su mórbido timbre.

El tercer movimiento, Adagio pensieroso, es de carácter elegíaco, con una estructura en que se contraponen partes de textura acordal con floreos rapsódicos del saxofón, con otros de fluido contrapunto.

El último movimiento, Allegro deciso, se inicia presentando el motivo celular octatónico del cual fluye una continua energía rítmica y virtuosística que se mantiene a lo largo de todo el movimiento -por el que pasan algunos materiales de los movimientos anteriores- para rematar en un sonoro tutti.

La Partita op.100 fue estrenada en 1990 e interpretada por Eugene Rousseau y el Trío Haydn, en Viena. En Chile su estreno se hizo el 16 de enero de 1998 en la Sala Isidora Zegers de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, en Santiago, con ocasión del XIII Festival de Música Chilena, donde obtuvo el Premio de Honor. Interpretaron la obra: Miguel Villafruela (saxofón alto), Jaime de la Jara (violín), Patricio Barría (cello) y Cirilo Vila (piano).


Comentario de Fernando García.

Grabación(CD) CONCERTANTE.Música de Cámara para saxofón. Miguel Villafruela. Obras de Juan Orrego-Salas. (2004) CD Saxofón en Concierto:
EditoraPeer International Corporation
Observaciones

Grabaciones de la obra:

  • 1.(CD) Eugene Rousseau and The Haydn Trio of Viena. (1998).Eugene Rousseau (saxofón alto) y el Trío Haydn de Viena.
  • 2.(CD) Saxofón en Concierto. Compositores Chilenos (1988-1998). Miguel Villafruela (2000). Miguel Villafruela (saxofón alto), Jaime de la Jara (violín), Patricio Barría (cello) y Cirilo Vila (piano).
  • 3.(CD) CONCERTANTE.Música de Cámara para saxofón. Miguel Villafruela. Obras de Juan Orrego-Salas. (2004). Miguel Villafruela (saxofón alto), Jaime de la Jara (violín), Patricio Barría (cello) y Cirilo Vila (piano).